El excentrocampista alemán analiza el presente del Real Madrid, el desgaste del calendario futbolístico y la irrupción de Lamine Yamal.
Toni Kroos se retiró hace exactamente un año, pero sigue siendo una de las voces más respetadas del mundo del fútbol. En una reciente entrevista concedida a La Gazzetta dello Sport, el exjugador del Real Madrid abordó varios temas de actualidad, desde la transición en el banquillo blanco hasta su opinión sobre los nuevos formatos de competición y el talento precoz de Lamine Yamal.
Sobre el Real Madrid, Kroos fue tajante: “No voy a volver y ellos lo saben, pero es cierto que falta un perfil como yo y siguen buscándolo”, declaró. Reconoció que no es fácil encontrar jugadores con sus características: “El problema es que no hay muchos como yo, y los que hay no son fáciles de conseguir”.
Respecto al relevo de Carlo Ancelotti por Xabi Alonso, Kroos valoró positivamente el cambio: “Es un movimiento que beneficia a todos. Carlo ha conseguido un trabajo fantástico con Brasil y Xabi da un paso adelante. Todavía es pronto para evaluar el Madrid de Xabi, pero ya demostró su valía en Alemania”.
El alemán también opinó sobre el rendimiento del equipo blanco: “Los buenos jugadores pueden y deben jugar juntos. Hay cosas que corregir, pero Xabi sabrá hacerlo. Con tanta calidad, necesariamente saldrá bien”.
Uno de los temas que más le preocupa a Kroos es la sobrecarga de partidos: “Jugamos demasiado y eso afecta la calidad. Más dinero, menos descanso: más lesiones, menos motivación”, aseguró, refiriéndose al nuevo Mundial de Clubes y la Liga de Naciones. “No he cambiado de opinión desde que jugaba: no se puede rendir al máximo durante 11 meses seguidos”.
Sobre su excompañero Luka Modric, ahora en el Milan, Kroos fue elogioso: “Siempre fue especial. Físicamente ya no es el mismo, pero su calidad no se pierde. Lo importante es que siga disfrutando del fútbol”.
Finalmente, dedicó palabras de admiración para Lamine Yamal, la joven estrella del FC Barcelona: “Nunca había visto algo así a su edad. Tiene un talento natural evidente, pero lo que más impresiona es su constancia y madurez en momentos difíciles. A los 17 años, eso no es normal”. Y añadió: “Una carrera es un maratón, no un sprint. Habrá que ver cómo evoluciona dentro y fuera del campo”.
