El mercado inmobiliario español vive un momento sin precedentes. Según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), el precio de la vivienda de segunda mano se incrementó un 12,8% en el segundo trimestre del año, superando los niveles registrados en 2007, justo antes del estallido de la burbuja inmobiliaria.
El índice general de precios de la vivienda también registró un repunte del 12,7%, marcando la subida más alta de los últimos 18 años. Este aumento refleja una fuerte demanda frente a una oferta limitada, lo que está tensionando el mercado y afectando directamente a quienes buscan comprar su primera vivienda o cambiar de hogar.
Expertos del sector advierten que la tendencia al alza podría continuar en los próximos meses, impulsada por factores como los bajos tipos de interés históricos y la escasez de nuevas promociones en muchas ciudades españolas. Esta situación coloca a la vivienda de segunda mano en el centro del debate sobre accesibilidad y sostenibilidad del mercado inmobiliario.