En un dramático séptimo partido de las Finales NBA 2025, una lesión terrible de Tyrese Haliburton en apenas siete minutos cambió el rumbo definitivo de la serie. El base de los Pacers, cuyo talento y puntería habían mantenido vivo el sueño de Indiana, sufrió un grave problema en el tendón de Aquiles, dejando al equipo vulnerable ante la imparable respuesta de los Oklahoma City Thunder.
El partido arrancó frenético, con Haliburton anotando triples decisivos que igualaron el marcador 16-16. Sin embargo, la tragedia golpeó cuando su pierna derecha falló y cayó al suelo entre lágrimas. Este duro revés supuso un golpe emocional y deportivo para los Pacers, que vieron cómo su inspiración se desvanecía en el Paycom Center.
A partir de ese momento, los Thunder, liderados por un Shai Gilgeous-Alexander brillante y sereno, tomaron el control del partido. Con 29 puntos y 12 asistencias, el joven estrella condujo a su equipo en una segunda mitad dominante, donde la defensa y los triples caían en cascada. Un parcial demoledor de 18-0 en el tercer cuarto cimentó la ventaja definitiva.
Los Pacers lucharon con garra, intentando resistir la tormenta, pero la maquinaria de OKC ya estaba en marcha. Con un 103-91 final, los Thunder celebraron un título que coronó una temporada memorable, mientras que el drama de Haliburton quedará grabado como uno de los momentos más amargos de estas Finales.
El deporte, con su belleza y crueldad, nos deja estas historias de gloria y desdicha. Esta vez, la edad del trueno ya es una realidad para Oklahoma City.
