La operación desarrollada por la Guardia Civil ha culminado con la detención de otras dos personas que presuntamente habrían llevado a cabo labores activas de proselitismo y difusión del ideario yihadista. El control de los procesos de radicalización llevado a cabo por la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias (SGIP) ha sido clave para identificar y neutralizar la actividad de estos internos
La Guardia Civil ha detenido a dos internos y a una tercera persona en Ceuta que había estado con anterioridad en prisión y que habrían llevado a cabo en distintos centros penitenciarios actividades proselitismo, captación y difusión de postulados yihadistas de manera concertada y coordinada respondiendo a una estrategia común.
Dichas actividades, que estarían en línea con la estrategia global marcada por la organización terrorista Dáesh, consistían en la materialización de acciones públicas para trasladar los mensajes o consignas de la citada organización, entre las que se encontrarían la realización de pintadas en zonas comunes de las prisiones así como difundir a través de correspondencia postal contenidos idóneos para incitar a la afiliación terrorista.
En el CP de Murcia II se ha procedido a la detención del identificado como I. M., quien se encuentra como preso preventivo por delitos de terrorismo y es conocido por su actividad radical y adoctrinadora. La investigación ha puesto de manifiesto que sus actividades delictivas en prisión no eran hechos aislados sino que obedecían a una estrategia común.
En el CP de Teixeiro (A Coruña) se ha detenido al identificado como R. B., quien se encuentra cumpliendo condena por delitos contra el patrimonio, aunque está catalogado como interno de especial seguimiento (FIES) por tratarse de un interno radicalizado durante su estancia en prisión.
Por último, se ha procedido a la detención de M.D. en la localidad de Ceuta. Esta persona estuvo en prisión durante dos períodos diferentes y en ambos ejerció actividades proselitistas y de difusión de consignas yihadistas.
En la investigación, dirigida por el Juzgado Central de Instrucción número 1 de la Audiencia Nacional y coordinada por la Fiscalía, fue clave la actividad de control y seguimiento realizado por la SGIP al objeto de identificar las actividades de los ahora detenidos.
Gracias al conocimiento de los procesos de radicalización en prisión, la investigación ha puesto de manifiesto que las actividades de estos detenidos se pueden enmarcar en una dinámica grupal más amplia en la que de manera concertada y coordinada centraban sus esfuerzos en radicalizar, captar y adoctrinar ideológicamente en los postulados de la organización terrorista Daesh a nuevos individuos dentro de prisión
La Guardia Civil ha llevado a cabo diversas operaciones en el ámbito penitenciario en los últimos años. Todas ellas junto con la Administración Penitenciaria, están en consonancia con la vigente Estrategia Nacional Contra el Terrorismo que establece como prioridad la detección y neutralización de procesos de radicalización en los centros penitenciarios.