El presidente catalán y la mandataria madrileña encarnan dos visiones opuestas del modelo territorial y acumulan años de enfrentamientos por temas como la financiación autonómica o el uso del catalán.
El nuevo escenario político tras las elecciones autonómicas en Cataluña ha reactivado un viejo enfrentamiento entre dos de las figuras más representativas del mapa político español: Salvador Illa, presidente de la Generalitat, e Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la Comunidad de Madrid.
Ambos líderes encarnan proyectos políticos diametralmente opuestos. Illa, al frente del Govern catalán, defiende una mayor descentralización del Estado, una financiación singular para Cataluña y la promoción activa del catalán como lengua vehicular. Por su parte, Ayuso, referente del ala más conservadora del PP, rechaza cualquier trato diferenciado para las comunidades autónomas y se ha mostrado especialmente crítica con el uso del catalán en detrimento del castellano en la educación.
Los desencuentros entre ambos no son nuevos. Durante la pandemia, ya protagonizaron choques mediáticos sobre la gestión sanitaria. Hoy, la confrontación se centra especialmente en dos ejes: la financiación autonómica —donde Cataluña exige más recursos y Madrid denuncia privilegios— y la política lingüística, que Ayuso ha tildado de “sectaria” en múltiples ocasiones.
Con el avance de las negociaciones entre el Gobierno central y la Generalitat sobre el nuevo modelo de financiación, y con Ayuso alzando la voz desde la Puerta del Sol, se prevé que el enfrentamiento entre ambos líderes siga marcando la agenda política nacional en los próximos meses.
