La Justicia británica ha ordenado hoy la liberación de Peter Sullivan, un hombre condenado erróneamente a cadena perpetua, tras pasar 38 años en prisión por un crimen que no cometió. A sus 68 años, Sullivan se convierte en la persona que más tiempo ha estado encarcelada injustamente en el Reino Unido.
Sullivan fue condenado en 1987 por un asesinato ocurrido en el sur de Londres, en un caso que, según las autoridades, estuvo marcado por irregularidades en la investigación, testimonios dudosos y pruebas forenses deficientes. Nuevas pruebas de ADN, presentadas recientemente, demostraron de forma concluyente que Sullivan no estuvo involucrado en el crimen.
«Hoy es un día de alivio, pero también de profunda tristeza por el tiempo perdido», declaró Sullivan al salir de la prisión de máxima seguridad de Belmarsh. «Han sido casi cuatro décadas de lucha constante para probar mi inocencia.»
La Corte de Apelaciones de Inglaterra y Gales anuló la condena tras revisar las nuevas pruebas, calificando el caso como «una grave falla del sistema judicial». El Tribunal también anunció una investigación independiente para esclarecer cómo se produjo este error y qué responsabilidades deben asumirse.
Organizaciones de derechos humanos han aplaudido la liberación, pero han pedido al Gobierno una revisión urgente del sistema judicial británico y mayor rigor en la revisión de condenas cuestionadas.
Se espera que Sullivan reciba una compensación económica, aunque su equipo legal ya ha adelantado que lo más importante ahora es que pueda reconstruir su vida en libertad, tras casi cuatro décadas de encierro injustificado.
