El Juzgado de Primera Instancia y de Instrucción número 2 de Ceuta ha dictado una sentencia firme que obliga a un dentista, a la clínica donde ejercía y a la aseguradora del centro a pagar de manera solidaria un total de 12.100 euros por una intervención odontológica negligente que provocó daños físicos y estéticos a una paciente.
El fallo establece que la intervención, realizada entre 2020 y 2021, consistió en una rehabilitación mediante coronas de zirconio sobre dientes o implantes con el fin de restaurar la función masticatoria y la estética de la sonrisa. Sin embargo, el procedimiento derivó en complicaciones que obligaron a la paciente a someterse a nuevas operaciones, cuyos gastos también fueron objeto de la demanda.
El tribunal determinó que la actuación del dentista constituyó mala praxis y que la clínica careció de un control adecuado sobre el tratamiento. La aseguradora del centro también fue responsabilizada por la indemnización. La acusación reclamaba inicialmente 96.217,24 euros por daños y perjuicios, pero la magistrada redujo la cantidad a los costes parciales del tratamiento inicial y los intereses legales.
Durante el proceso judicial, se aportaron informes periciales, la historia clínica de la paciente, fotografías y otros documentos relacionados con las intervenciones. La representación legal de la demandante estuvo a cargo del abogado Néstor García León.










