Juan Sergio Redondo, líder del partido VOX en Ceuta, ha lanzado duras críticas contra el ministro de Exteriores de Marruecos, acusándolo de mentir sobre la disposición de su país para recibir a menores marroquíes que se encuentran en Europa. Según Redondo, las declaraciones del ministro, que atribuyen el problema a las leyes y trámites europeos, son engañosas.
Redondo argumenta que las repatriaciones de menores son posibles y que la falta de acción no se debe a impedimentos legales, sino a una falta de voluntad política tanto por parte del Gobierno marroquí como del español. «Existen acuerdos bilaterales que regulan el procedimiento», subraya Redondo, sugiriendo que ambos gobiernos tienen la capacidad de actuar si realmente lo desean.
El líder de VOX en Ceuta destaca que la situación actual es insostenible y que se requiere una acción decidida para resolver el problema de los menores no acompañados. Según él, la responsabilidad recae en ambos países, que deben cumplir con sus compromisos internacionales y proteger los derechos de los menores.
Acuerdos bilaterales
Los acuerdos bilaterales entre España y Marruecos establecen un marco claro para la repatriación de menores. Estos acuerdos incluyen procedimientos específicos que garantizan que las repatriaciones se realicen de manera segura y respetuosa con los derechos humanos. Sin embargo, Redondo insiste en que estos acuerdos no se están aplicando adecuadamente.
La falta de aplicación de estos acuerdos, según Redondo, es una muestra de la falta de interés de ambos gobiernos en resolver el problema. «Es una cuestión de voluntad política», afirma, instando a las autoridades a actuar con responsabilidad.
Impacto en Ceuta
Ceuta, como ciudad fronteriza, se encuentra en el centro de esta problemática. La presencia de menores no acompañados ha generado tensiones sociales y políticas, y Redondo advierte que la situación podría empeorar si no se toman medidas efectivas. «Ceuta no puede seguir soportando esta carga sola», declara, pidiendo una mayor colaboración entre España y Marruecos.
Conclusión
La controversia sobre la repatriación de menores marroquíes pone de manifiesto las complejidades de las relaciones diplomáticas entre España y Marruecos. Mientras las acusaciones de mentiras y falta de acción continúan, la necesidad de soluciones concretas y efectivas se vuelve cada vez más urgente. Redondo concluye que solo mediante un esfuerzo conjunto y sincero se podrá avanzar hacia una solución sostenible.
