El Partido Popular ha impulsado una reforma del reglamento del Senado que introduce importantes novedades en el funcionamiento de la Cámara Alta. Entre las medidas aprobadas se incluye la fijación de un tiempo máximo de intervención para los ministros que comparezcan en el hemiciclo, así como la creación de una nueva vía para presentar recursos ante el Tribunal Constitucional.
El documento aprobado también establece que jueces y magistrados no estarán obligados a acudir a las comisiones de investigación, una medida que, según sus impulsores, busca garantizar la independencia del poder judicial.
Varios grupos parlamentarios han expresado su disconformidad con el texto, señalando la ausencia de referencias a las lenguas cooficiales en el nuevo reglamento, un aspecto que consideran un retroceso respecto a la pluralidad lingüística reconocida en otras instituciones.
Con estos cambios, el PP consolida su mayoría en el Senado para adaptar las normas internas a su criterio de funcionamiento, en un contexto de tensiones políticas y debates sobre el papel de la Cámara Alta en el equilibrio institucional.




