Santos Cerdán y su socio, Antxón Alonso, adoptaron diversas medidas para proteger la privacidad de sus comunicaciones y reuniones, según un informe elaborado por la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil en el marco del denominado ‘caso Koldo’. El documento, fechado el 11 de noviembre, detalla cómo el exsecretario de Organización del PSOE incrementó sus precauciones a partir del verano de 2021, después de la destitución de José Luis Ábalos como ministro de Transportes.
De acuerdo con los investigadores, aunque Cerdán ya tomaba algunas precauciones desde 2020 —como apagar el teléfono móvil durante encuentros con el propietario de Servinabar 2000 S.L.—, fue a partir de la salida de Ábalos cuando habría comenzado a utilizar métodos más sofisticados para blindar sus comunicaciones.
Entre las herramientas empleadas destaca el uso de la aplicación de mensajería cifrada Threema, conocida por su enfoque en el anonimato y la protección de datos. La primera conversación localizada por la UCO a través de esta plataforma data del verano de 2021. Desde entonces, su empleo se intensificó, al menos en el intercambio de mensajes entre Cerdán y Alonso.
El informe recoge, por ejemplo, que el 15 de noviembre de 2021 el empresario vasco contactó con el exdirigente socialista a través de esta aplicación para proponerle tomar un café cerca de la sede del PSOE en la calle Ferraz. Un mes después, el 9 de diciembre, se repitió un contacto similar, esta vez acompañado de una imagen enviada por Alonso: una fotografía de un documento oficial de la República de Gabón, redactado en francés, que certificaba una deuda a la empresa Acciona por valor de 13.581.919.280 francos CFA, una cantidad que supera actualmente los 20 millones de euros.
Además del uso de mensajería segura, los investigadores señalan otras prácticas destinadas a evitar posibles rastreos, como la celebración de reuniones en un inmueble alquilado por Servinabar, el apagado de teléfonos durante encuentros presenciales o el empleo de notas manuscritas mostradas en pantallas durante videollamadas.
En este contexto, la Guardia Civil también ha puesto el foco en varias videoconferencias entre Antxón Alonso y Justo Vicente Pelegrini, exdirector de Acciona Construcción España, quien declaró recientemente ante el juez Leopoldo Puente. Una de esas llamadas, fechada el 8 de julio de 2019, fue detectada a través de una fotografía intervenida en un dispositivo de Alonso, donde se aprecia una hoja con anotaciones manuscritas que la UCO vincula con obras públicas adjudicadas a Acciona.
Pelegrini aseguró ante el Tribunal Supremo que aquella videollamada tenía como único objetivo tratar asuntos relacionados con Servinabar y negó cualquier finalidad irregular. Sin embargo, los investigadores destacan la coincidencia entre algunos nombres de ciudades anotados en ese documento y licitaciones públicas que fueron convocadas pocos días después y finalmente adjudicadas a la compañía constructora.












