El conductor del vehículo eléctrico acabó en el hospital, donde se le diagnosticó un traumatismo craneoencefálico y múltiples contusiones. Resultó ser positivo en cocaína, benzodiazepinas y opiáceos
Manejar cualquier vehículo habiendo consumido sustancias estupefacientes puede tener graves consecuencias. Un ejemplo de ello es el accidente que sufrió el pasado jueves el conductor de un patinete eléctrico en la barriada Juan Carlos I y sobre el que ha informado la propia Policía Local, que a las 16:15 horas recibía el aviso sobre el suceso.
Una vez en el lugar de los hechos los agentes de la policía se encontraron con una persona tendida en el suelo con un fuerte golpe en la cabeza y que había perdido el conocimiento. Según un testigo presente durante el accidente, el conductor del patinete perdió el control del vehículo y durante la caída se golpeó fuertemente contra el bordillo de la acera, motivo por el que perdió el conocimiento.
El hombre, que dio positivo en cocaína, benzodiazepinas y opiáceos, tuvo que ser trasladado por el servicio sanitario al Hospital Universitario, donde se le han practicado las pruebas oportunas y se ha confirmado que sufrió un traumatismo craneoencefálico, además de múltiples contusiones producidas por la erosión del pavimento.
