Pedro Sánchez ha decidido confiar nuevamente en Óscar López Hernando —considerado uno de los “fontaneros” políticos más experimentados del entorno presidencial— para dirigir los contactos con PNV y EH Bildu, en sustitución de Santos Cerdán. El cambio supone un ajuste significativo dentro del engranaje negociador del Gobierno con sus principales socios parlamentarios.
Hernando, que fue número dos del gabinete del presidente, recupera así un papel clave en la interlocución política. Según la información disponible, participó al menos en una reunión con el grupo liderado por Leire Díez, en un contexto de conversaciones destinadas a reforzar la estabilidad de la mayoría en el Congreso.
La decisión de Sánchez responde al objetivo de fortalecer los canales de comunicación y optimizar la coordinación interna en un momento de alta sensibilidad política. Fuentes del Ejecutivo destacan que el presidente busca volver a métodos de trabajo que considera especialmente efectivos en etapas anteriores.
Por ahora, el Gobierno no ha detallado el calendario de nuevos contactos ni el alcance del rol que desempeñará Hernando, aunque insiste en que la interlocución con PNV y EH Bildu seguirá siendo prioritaria para asegurar la continuidad de la legislatura.










