Un hombre de 31 años fue reducido y detenido este lunes por la Policía Nacional después de amenazar con hacer estallar dos bombonas de butano desde su vivienda, situada en la calle Montera, esquina con Gran Vía, en pleno centro de Madrid.
Según fuentes policiales, el individuo —paciente psiquiátrico— salió a su balcón alrededor de las 16.30 horas, con los brazos ensangrentados, y comenzó a gritar que haría explotar el edificio. Desde allí lanzó una bombona hacia la terraza del bar La Española, ubicada justo debajo, mientras sostenía otra en sus brazos.
Ante la gravedad de la situación, los agentes intervinieron de inmediato. El hombre llegó a encender un mechero junto a la bombona, lo que precipitó la actuación policial antes de que llegara el negociador. Aprovechando que la puerta de la vivienda estaba entreabierta, accedieron al interior y lograron reducirlo utilizando una pistola táser. Fue detenido sobre las 17.30 horas y trasladado al Hospital Clínico San Carlos para una evaluación.
Testigos relatan que el hombre, visiblemente alterado, también amenazó con suicidarse y con matar a los vecinos del edificio. Una residente señaló que en el piso donde vive “hay mucha gente” y lo describió como “un almacén de drogas”, mientras que otro vecino aseguró que la presencia policial en la finca “no es nueva”.
El incidente obligó a desplegar un amplio dispositivo de seguridad, con varios coches patrulla, bomberos —que colocaron una colchoneta inflable por si el hombre se arrojaba al vacío— y servicios sanitarios. La estación de metro de Gran Vía permaneció cerrada temporalmente, aunque ya ha recuperado la normalidad.
En el bar afectado, trabajadores y clientes agradecieron la rápida actuación policial. “Es una persona que claramente no está bien de la cabeza. Nunca había llegado tan lejos como hoy. A cualquiera le podría haber caído la bombona encima”, declaró un camarero, visiblemente aliviado de que el suceso no terminara en tragedia.