La Junta presenta un visor de parcelas en las principales ciudades de la comunidad con el objetivo de cubrir un cuarto del déficit habitacional. Más de 8.000 pisos procederán de suelos industriales y dotacionales recalificados.
La Junta de Andalucía ha dado un paso clave en su estrategia para aliviar la presión del mercado inmobiliario con la puesta en marcha de un visor de parcelas municipales destinadas a vivienda protegida. La herramienta, presentada por la Consejería de Fomento que dirige Rocío Díaz, identifica suelos en los que se podrán construir cerca de 41.000 viviendas asequibles, lo que supondría cubrir casi una cuarta parte del déficit estimado por el Banco de España en la comunidad (200.000 pisos a finales de 2025).
El programa se apoya en una bolsa de suelo municipal que incluye terrenos de las principales ciudades andaluzas, tras la obligación impuesta por decreto a los municipios de más de 100.000 habitantes. El resultado son 659 bolsas de suelo, con 1,5 millones de metros cuadrados disponibles. Málaga encabeza el listado con 8.511 viviendas proyectadas, seguida de Sevilla (7.469) y Dos Hermanas (6.805).
Una de las claves de la iniciativa es la recalificación de suelos terciarios, dotacionales e industriales para destinarlos a uso residencial. En total, 8.115 pisos se edificarán en terrenos originalmente previstos para oficinas, comercios, edificios públicos o fábricas, lo que permitirá ampliar la oferta de vivienda protegida en zonas urbanas consolidadas.
Durante la presentación, la consejera Díaz pidió la colaboración del sector privado y defendió que el plan requiere “sumar esfuerzos” para garantizar el acceso a la vivienda. Empresarios y técnicos coincidieron en la necesidad de agilizar trámites y adaptar los proyectos a la realidad social. “Tenemos que construir más pisos, pero también más pequeños, para familias que ya no son como las de hace 30 años”, apuntó Helena Ruiz, presidenta del Colegio de Arquitectos Técnicos de Sevilla.
El presidente de FADECO Promotores, Ignacio Peinado, destacó que el visor “pone en valor el esfuerzo de coordinación entre Junta y ayuntamientos” y recordó que la disponibilidad de suelo era uno de los principales obstáculos para la promoción de viviendas asequibles.
La medida llega en pleno debate parlamentario de la nueva ley autonómica de vivienda, convertida en uno de los ejes políticos del Gobierno de Juanma Moreno. Aunque el Ejecutivo defiende que la norma busca desbloquear el suelo y facilitar la inversión, colectivos como el Sindicato de Inquilinas de Sevilla critican que “no resuelve el problema habitacional, sino que calienta el mercado”.
Con este plan, la Junta confía en activar la construcción de decenas de miles de viviendas en los próximos años, apoyándose en la colaboración público-privada y en la liberación de terrenos hasta ahora infrautilizados.