El miembro de ETA fue condenado por el atentado con coche bomba que mató al político vasco y su escolta. Había obtenido el tercer grado y cumplía parte de su condena de forma telemática.
Asier Carrera Arenzana, antiguo integrante de la organización terrorista ETA, ha salido en libertad condicional tras cumplir 25 años de prisión por su participación en el fatal atentado en el que fueron asesinados el dirigente socialista vasco Fernando Buesa y su escolta, el ertzaina Jorge Díaz.
La decisión fue tomada por el juez de Vigilancia Penitenciaria, que consideró que Carrera cumple los requisitos para esta medida, ya que desde octubre de 2023 estaba en tercer grado penitenciario, lo que le permitía cumplir parte de su condena bajo control fuera de la cárcel. De hecho, desde enero de 2024 lo hacía a través de medios telemáticos, gracias a una autorización especial.
El atentado tuvo lugar el 22 de febrero del año 2000 en Vitoria: Carrera fue identificado como la persona que activó el coche bomba mediante un mando a distancia, lo que causó la muerte de Buesa y su escolta. Posteriormente, fue detenido en Bilbao y condenado por estos crímenes y otros relacionados con ETA, recibiendo una pena de más de cien años de cárcel.
Aunque la libertad condicional representa un paso significativo, viene con condiciones estrictas: debe cumplir con ciertas restricciones impuestas por el juez, que incluyen limitaciones en su residencia y prohibiciones de participar en actos públicos que puedan glorificar el terrorismo. Además, el proceso de reinserción será monitoreado para verificar que no representa un riesgo para la sociedad.
La decisión ha generado reacciones encontradas: para algunas asociaciones de víctimas supone una herida más en el difícil proceso de reconciliación, mientras que otros organismos penitenciarios y judiciales defienden que la justicia permite estas medidas cuando se cumplen los requisitos legales y de conducta.








