Saltaba hace la noticia de la operación de importación de 62.000 toneladas de escombro desde Gibraltar a nuestra localidad. La Consejería de Medio Ambiente da su visto bueno a esta operación privada por medio de su Consejero Yamal Driss. hablando de reglamento europeo. Cuestionamientos:
- Competencia de la Ciudad Autónoma de Ceuta para importar RSU de Gibraltar, máxime sin haberse concluido las negociaciones del “Brexit”.
- Control de RSU para valorar su nivel de contaminación.
- Situación actual de la planta privada de inertes, cumplimiento en materia mediomabiental y respuestas a la ciudadanía de la degradación del denominado “Arroyo de las Bombas”, por el rellenado de su cuenca, y de la colina que sustenta la torre neomedieval “Piniers”, por sucesiva excavaciones de taludes en sus proximidades.
- Control de emisión masiva de partículas de polvo por esta planta de inertes y la posible toxicidad generada a los ciudadanos que viven a pocos metros de ella.
- Balance medioambiental entre una ciudad que exporta, que sepamos, unas 50.000 toneladas/año de RSU a Andalucía y ahora va a importar unas 62.000 toneladas en un año a un territorio con una superficie muy reducida.
- Explicar a empresarios y autónomos de la Ciudad Autónoma de Ceuta la facilidad con la que importamos miles de toneladas de escombros pero la inmensa dificultad que tienen ellos para recibir y fiscalizar envíos de sus respectivos negocios gracias al DUA.
Es la ciudadanía ceutí digna de recibir explicaciones a esta obscurantista operación en un momento complicado y en el que tenemos que coger las riendas para el cumplimiento de una agenda medioambiental que ya llega tarde o nos tendremos que comer una aparente nefasta gestión que nos recuerda a otro “no hay cojo…aguántame el cubata que verás”.
El tiempo y la lenta justicia terminarán sacando a la luz la verdad, está vez de entre los escombros.
