Una familia de Toledo ha conseguido quedar completamente libre de deudas tras acogerse a la Ley de Segunda Oportunidad, un mecanismo legal que ha permitido extinguir los 97.871,05 euros que acumulaban como consecuencia de una pérdida repentina de ingresos. La situación económica del hogar se deterioró hasta el punto de depender de créditos y préstamos para cubrir necesidades básicas como la alimentación, el suministro eléctrico o los gastos escolares.
«Intentábamos cumplir, pero cada mes era más difícil. No se trataba de caprichos, sino de mantener la luz, la comida o el colegio de los niños», relata uno de los miembros de la familia, que durante años arrastró embargos, intereses en aumento y constantes llamadas de entidades financieras.
Ante el desgaste emocional y económico, decidieron solicitar ayuda a la Asociación Ayuda al Endeudamiento, especializada en la aplicación de la Ley de Segunda Oportunidad. La entidad acompañó a los deudores en todo el proceso hasta conseguir la Exoneración del Pasivo Insatisfecho (EPI).
«Este resultado no solo libera económicamente a una familia, sino que devuelve su confianza en sí misma y en el sistema. Cuando alguien pierde la esperanza, deja de participar en la economía y en la vida social. Esta ley no solo borra deudas, sino que devuelve sentido y dignidad», explica José Domínguez, abogado de la asociación.
El procedimiento culminó con una resolución del Juzgado de lo Mercantil nº 1 de Toledo, que declaró a la familia exenta de sus obligaciones económicas. A partir de ahora podrán reorganizar su vida sin embargos ni presiones bancarias. Los acreedores tampoco podrán exigir nuevos pagos ni incluirlos en ficheros de morosidad.
Este caso sigue la línea de otros procesos recientes, como el de una pareja de Ciudad Real a la que también se le condonaron 40.000 euros tras varias inversiones fallidas, un ejemplo más del alcance de esta herramienta legal pensada para quienes afrontan situaciones económicas extremas.








