La consellera de Hacienda y Economía, Ruth Merino, ha solicitado al Gobierno de España que adopte medidas excepcionales para que los titulares de vehículos afectados por la riada del pasado octubre puedan conservar las ayudas, incluso si sus coches no han sido localizados ni peritados.
Merino ha explicado que, aunque estos vehículos cuentan con una baja provisional, la Dirección General de Tráfico (DGT) no puede emitir la baja definitiva sin un peritaje que confirme que los coches son inservibles y deben ser achatarrados. Esta situación podría impedir que los afectados recibieran la indemnización del Consorcio de Compensación de Seguros y las ayudas de la Generalitat.
“Somos conscientes de la inquietud y la impotencia que esta circunstancia genera a cientos de afectados y en ningún caso queremos llegar a esa situación”, afirmó la consellera. Por ello, la Agencia Tributaria Valenciana (ATV) está gestionando todas las acciones necesarias para garantizar que los beneficiarios no pierdan las ayudas, aunque la competencia final corresponde a la DGT.
Ruth Merino ha instado a la DGT a habilitar un procedimiento extraordinario que permita dar de baja definitiva, de oficio, los vehículos con baja provisional que no han podido ser peritados por no haber sido localizados.