El debate político volvió a elevar la temperatura en el Congreso de los Diputados. El líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, insistió en sus acusaciones sobre la corrupción en el Gobierno, mientras que el presidente Pedro Sánchez replicó señalando el “desorden interno” del PP y la falta de un proyecto coherente para España.
Desde Junts, sus portavoces advirtieron que “ha llegado la hora del cambio”, en referencia al desgaste del actual Ejecutivo y la necesidad, según su visión, de abrir una nueva etapa política. El grupo independentista catalán se presenta así como una fuerza decisiva en el tablero parlamentario.
La jornada estuvo marcada también por la polémica intervención de la portavoz de EH Bildu, que denunció la falta de medidas firmes contra el fascismo. Sus palabras provocaron una airada reacción en las filas del PP, que calificaron el discurso de “asco” y criticaron que procediera de un partido con un pasado vinculado a la izquierda abertzale.
El intercambio de reproches entre los principales líderes dejó patente el clima de confrontación que domina el panorama político, a pocos meses de un nuevo ciclo electoral.