El 23 de mayo de 2017, apenas 48 horas después de instalarse en la sede socialista de Ferraz tras el triunfo de Pedro Sánchez en las primarias del PSOE, Santos Cerdán mantuvo una cena en un restaurante de Madrid con un alto directivo de Acciona. El encuentro tenía como objetivo abordar detalles relacionados con Mina Muga, el que posteriormente se convertiría en el primer contrato vinculado a la trama investigada.
Según fuentes próximas al caso, la reunión se produjo en un contexto de reorganización interna del partido y en un momento en el que Cerdán asumía nuevas responsabilidades tras la victoria de Sánchez. Durante el encuentro, ambos interlocutores discutieron aspectos relevantes del proyecto minero, un contrato de gran envergadura que ya entonces despertaba interés en distintos ámbitos políticos y empresariales.
Mina Muga, ubicada entre Navarra y Aragón, es un proyecto estratégico para la extracción de potasa y ha sido objeto de múltiples evaluaciones y controversias en los últimos años. La cita entre Cerdán y el directivo de Acciona se ha convertido en una pieza clave para los investigadores, que buscan determinar la naturaleza de las gestiones realizadas y su posible vínculo con la red de adjudicaciones bajo sospecha.
La cena del 23 de mayo se sitúa así en el punto de partida de una serie de contactos que, según los investigadores, podrían haber influido en la adjudicación del proyecto. El análisis de esta reunión y de los movimientos posteriores será determinante para esclarecer si existió algún tipo de intermediación irregular o trato de favor.
Por el momento, ninguna de las partes implicadas ha ofrecido una explicación pública sobre el contenido exacto del encuentro.








