En los últimos años, España ha experimentado un aumento alarmante del 47% en las denuncias de violencia machista desde 2010. La delegada del Gobierno contra la Violencia de Género, Carmen Martínez Perza, ha señalado que este incremento se debe a que las mujeres se sienten más «amparadas y protegidas» al denunciar.
Martínez Perza ofreció sus declaraciones durante una entrevista en Radio Nacional de España (RNE), coincidiendo con el Día Mundial para la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres. En esta ocasión, destacó las políticas firmes que el Gobierno está implementando para combatir esta violencia «estructural», en el contexto de la ley integral contra la violencia de género.
«El sistema de atención a las víctimas es efectivo y complejo, siendo un ejemplo a seguir en Europa», afirmó la delegada. Este sistema involucra la colaboración de diversos niveles de administración, desde lo local hasta lo autonómico, así como la participación activa de ministerios como Igualdad, Justicia e Interior, y otras instituciones relevantes.
La violencia de género no es un problema aislado. A través del sistema Viogen, las autoridades han sido capaces de ofrecer protección a aquellas mujeres que se encuentran en riesgo. Cada día, este sistema salva vidas, proporcionando un marco de referencia que permite que las mujeres se sientan más seguras al denunciar. Nadie debe sentirse sola en su lucha contra el maltrato.
Sin embargo, a pesar de los avances, la delegada admitió que «todo es mejorable». A principios de febrero, se presentó un nuevo pacto contra la violencia de género que recibió el apoyo unánime de la mayoría del Congreso, salvo el grupo parlamentario de Vox, lo que demuestra un compromiso político hacia esta causa.
A pesar del aumento en las denuncias, se estima que solo el 4,8% de los casos se reportan por parte de terceras personas del entorno de la víctima. Esto pone de relieve el silencio que muchas veces rodea estas situaciones, lo que puede llevar a consecuencias fatales para las víctimas de violencia machista.
Respecto a las pulseras telemáticas, que se utilizan para proteger a las mujeres en riesgo, Martínez Perza pidió disculpas por cualquier «malestar e intranquilidad» que se haya podido generar por problemas técnicos. Reconoció que estos incidentes afectarían la credibilidad del sistema, lo que representa un peligro para las víctimas. Garantizó que las afectadas nunca han estado desprotegidas y que los protocolos de respuesta están claramente establecidos.
Por otra parte, la delegada expresó su preocupación por una reciente promesa del Partido Popular de derogar la ley del «sí es sí», asegurando que dicha acción desprotegería a las víctimas. Martínez Perza calificó esta ley integral como fundamental para atender adecuadamente a las personas afectadas por esta problemática.
Este 25 de noviembre, la Delegación del Gobierno contra la Violencia de Género ha lanzado una campaña para visibilizar y concienciar sobre la violencia vicaria, que es aquella dirigida a causar daño psicológico a las víctimas mediante el maltrato hacia sus seres queridos, especialmente hijos e hijas. La campaña, protagonizada por la actriz Ester Expósito, busca educar al público en general y fomentar el rechazo social hacia esta forma de violencia.
La violencia vicaria es una forma a menudo invisible y cotidiana de maltrato que se intensifica cuando la mujer decide distanciarse de su agresor. Las dinámicas de custodia y régimen de visitas permiten que el maltratador continúe causando daño de forma indirecta. Tanto la sociedad como los alrededores de las víctimas deben cumplir un rol en la identificación y comprensión de esta problemática.










