Extremadura vive este domingo 21 de diciembre una jornada histórica. Un total de 890.985 ciudadanos están llamados a las urnas en las primeras elecciones autonómicas de la región que se celebran de forma separada al resto de comunidades. La actual presidenta, la popular María Guardiola, se juega la reelección buscando una mayoría absoluta (33 escaños) que la libere de la dependencia de Vox, mientras el PSOE, liderado ahora por Miguel Ángel Gallardo, intenta frenar un posible voto de castigo en clave nacional.
Datos clave de la jornada electoral
Los colegios electorales han abierto sus puertas a las 9:00 horas y permanecerán operativos hasta las 20:00 horas. A lo largo del día, la Junta de Extremadura facilitará dos avances de participación oficiales:
• Primer avance: 14:30 horas.
• Segundo avance: 18:30 horas.
El escrutinio podrá seguirse en tiempo real a partir de las 20:30 horas a través de la web oficial de resultados habilitada para la ocasión.
¿Qué dicen las encuestas?
La campaña ha estado marcada por la incógnita de si el bloque de la derecha logrará la estabilidad o si el escenario político volverá al bloqueo que forzó el adelanto electoral tras el rechazo a los presupuestos de 2026.
• PP (María Guardiola): Los sondeos sitúan a los populares como la fuerza más votada con un 41,6% de los apoyos, lo que les otorgaría unos 30 escaños. Aunque supone un crecimiento respecto a 2023, la mayoría absoluta sigue pareciendo esquiva.
• PSOE (Miguel Ángel Gallardo): Los socialistas se exponen a una caída importante, con una previsión del 32,4% de los votos y 21 diputados, acusando el desgaste de la política nacional y el cambio de liderazgo tras la etapa de Guillermo Fernández Vara.
• Vox y Unidas por Extremadura: Vox consolidaría su crecimiento alcanzando el 13,2% de los votos (hasta 9 escaños), mientras que la coalición de izquierdas mantendría sus 5 representantes.
El dilema de la gobernabilidad
En juego están los 65 diputados de la Asamblea (36 por Badajoz y 29 por Cáceres). Si se confirman las proyecciones, Guardiola se enfrentaría de nuevo al dilema de pactar con Vox —partido con el que ha mantenido una relación tensa— o buscar una abstención técnica del PSOE para evitar un nuevo bloqueo.
La abstención, especialmente en las zonas rurales, será un factor determinante. Se espera que la participación sea una de las claves para inclinar la balanza hacia la mayoría absoluta o hacia un parlamento fragmentado que obligue a nuevas negociaciones a partir de mañana lunes.












