Las sospechas de Fernando Alonso sobre la legalidad de los procedimientos de Alpine se confirman tras una decisión de la FIA. El organismo sanciona al equipo francés por utilizar un mecanismo que iba más allá del reglamento, validando la crítica del piloto español.
La FIA confirma la ‘trampilla’ de Alpine y el ojo clínico de Alonso
La Fórmula 1 vuelve a ser escenario de polémica y, una vez más, la intuición y el conocimiento técnico de Fernando Alonso han quedado validados por una decisión de la Federación Internacional del Automóvil (FIA). El organismo rector del deporte ha sancionado a Alpine, el anterior equipo del asturiano, por haber incurrido en una violación reglamentaria en el Gran Premio de Las Vegas.
La controversia se centra en un «truco» o «trampilla» técnica que Alpine y su piloto Esteban Ocon habrían utilizado para obtener una ventaja indebida durante la competición. Alonso había expresado previamente sus reservas sobre la forma en que su antiguo equipo operaba al límite del reglamento, una crítica que muchos consideraron la frustración de un piloto veterano.
El detalle de la sanción en el Gran Premio de Las Vegas
Aunque la FIA no ha detallado públicamente el mecanismo exacto que utilizó Alpine, la sanción impuesta a Ocon en la carrera de Las Vegas actúa como la confirmación definitiva de las sospechas de Alonso.
En aquel Gran Premio, Ocon fue penalizado por una acción que, según la investigación posterior de la FIA, se vio facilitada por una interpretación o uso irregular de los sistemas del monoplaza. Esta decisión oficial valida que Alpine estaba manipulando o explotando una zona gris de la normativa para maximizar su rendimiento en pista, especialmente en situaciones de re-arranque o tráfico intenso.
Para Alonso, esta resolución no es una sorpresa. El piloto de Aston Martin siempre ha sido un maestro en detectar las debilidades y las zonas límite de los reglamentos. Su experiencia le permite identificar rápidamente cuándo un monoplaza rival está logrando un rendimiento inusual o insostenible bajo las normas teóricamente establecidas.
La implicación para el futuro de Alpine
La sanción no solo afecta el resultado puntual de una carrera, sino que arroja sombras sobre la gestión técnica de Alpine. La FIA subraya con su decisión la línea roja que el equipo francés no debe cruzar. Este tipo de validaciones dan un peso enorme a las palabras de Alonso, consolidando su estatus no solo como piloto, sino como una autoridad técnica dentro del paddock.
Mientras Alpine deberá revisar sus procedimientos para evitar futuras penalizaciones, Fernando Alonso y Aston Martin pueden tomar nota de que la FIA está vigilando de cerca la legalidad de los monoplazas, especialmente aquellos que han demostrado operar en el filo de lo reglamentario.








