Las bajas temperaturas se hacen sentir en toda España, siendo este miércoles 26 de noviembre el día más frío de la semana. Las condiciones climáticas adversas afectarán sobre todo a la mitad este de la península, las Islas Baleares y Melilla.
Según informa la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), se esperan heladas débiles en zonas montañosas, así como acumulaciones significativas de nieve en el Pirineo durante las primeras horas del día. Esta situación exige precaución entre quienes planeen actividades al aire libre.
En particular, se prevén vientos fuertes de componente norte que generarán rachas muy intensas en diversas regiones, incluyendo el bajo Ebro, las sierras de la Comunidad Valenciana, el Pirineo, Ampurdán y las Baleares. Por esta razón, se ha activado el aviso naranja en Menorca y el Ampurdán, mientras que también hay avisos amarillos en la Comunidad Valenciana, Aragón, Navarra y el País Vasco.
El avance de un sistema de altas presiones desde el oeste permitirá que la Península goce de una situación más estable a lo largo del día, con cielos poco nubosos o mayormente despejados en el sur y el nordeste. En el resto del país, se presentarán cielos más nubosos o cubiertos, aunque se espera que en la meseta Norte e Ibérica se abran algunos claros a medida que transcurra la jornada.
La cota de nieve se situará entre los 1000 y 1300 metros, pudiendo descender hasta los 600/800 metros en el área pirenaica. Esto significa que las lluvias se manifestarán en forma de nieve en altitudes significativas, lo que podría complicar el tráfico en carreteras de montaña.
De acuerdo con los pronósticos, se anticipan precipitaciones débiles en el área cantábrica, en el alto Ebro y el norte de Galicia, así como en la Ibérica y Pirineo. Sin embargo, se espera que estas lluvias disminuyan a lo largo del día, por lo que se recomienda estar atentos a las actualizaciones meteorológicas.
En las Islas Baleares, la situación será más inestable, con cielos nubosos y posibilidad de chubascos. En Menorca y Mallorca, estos chubascos podrían ser localmente intensos e incluso ir acompañados de granizo en momentos aislados, lo que pone en alerta a las autoridades locales.
En el archipiélago canario, el pronóstico indica cielos con nubosidad, algunas precipitaciones débiles en el norte de las islas montañosas y mínimos intervalos nubosos en el resto, donde también podría haber eventos aislados de lluvia. La población debe mantener precaución frente a las posibles lluvias en ciertas áreas.










