Contigo Somos Democracia pregunta a la Ciudad, qué piensa hacer con las consecuencias respecto a la implantación de los nuevos horarios de consumo de electricidad. Obligar a las familias que modifiquen sus hábitos de consumo para ahorrar en su factura eléctrica. A partir de ahora antes de conectar la lavadora prestarán atención al reloj. Esta formación lo ve como denigrante y nada práctico, es evidente que los que gobiernan no saben lo que es vivir con 430 euros y que un núcleo de familia con tres componentes, mirará el euro muy de cerca antes de gastarlo.
Nuestra formación tiene muy claro que a ningún partido político le importa la ciudadanía y un ejemplo claro es el acuerdo protagonizado entre PSOE-Unidas Podemos, que supuestamente firmaron un documento suscrito en diciembre del año 2019, donde ambos se comprometieron a reflejar que las tarifas eléctricas tendrían un precio más barato, bajo para los primeros tramos kilovatios hora, quedando literalmente en un brindis al sol, hecho al que nos tienen acostumbrados.
Al margen de otras cuestiones, como la dificultad de los cambios de hábitos que quieren imponer a todos los caballas, a lo referente a la organización doméstica en todos los hogares con niños, o la de ajustarse a un ritmo de vida que garantice el descanso recomendado por nuestros médicos, esta modificación por si no se habían dado cuenta, se topa con un problema normativo en nuestra Ciudad, la Ordenanza que regula el ruido o decibelios que produce una vivienda, por lo que poner una lavadora a esas horas supondrá un problema entre vecinos.
Carbonell, responsable de CSD opina que el dinero que piensan ahorrar con estas franjas horarias, por realizar las tareas domésticas con nocturnidad, se va ha evaporar con las multas, por no respetar las Ordenanzas del Ayuntamiento, multas que van desde los 3000 euros, por no hablar del esfuerzo que tendrá que realizar la Policía Local, la cual estará más pendiente de estos “menesteres” que de lo verdaderamente importante.
