El Consejo de Ministros aprobará este martes el proyecto de ley para la condonación parcial de la deuda autonómica, una medida que el Ejecutivo de Pedro Sánchez presenta como alivio financiero pero que no convence a las comunidades gobernadas por el PP. Tanto Andalucía como la Comunidad Valenciana reiteraron su rechazo, insistiendo en que la propuesta no resuelve sus problemas estructurales de financiación.
En el caso andaluz, la portavoz del Gobierno autonómico y consejera de Economía, Hacienda y Fondos Europeos, Carolina España, recordó que la comunidad no padece un problema de deuda, sino de financiación. Andalucía podría reducir casi a la mitad su pasivo —unos 18.000 millones de euros—, pero el Ejecutivo regional insiste en que la medida no se traduce en fondos adicionales para servicios públicos y califica la operación como una «trampa contable» y un «pago al chantaje del independentismo».
Pese a figurar entre las regiones peor financiadas, Andalucía mantiene uno de los niveles de deuda más bajos en términos relativos: 4.700 euros por habitante, frente a los 11.000 de Cataluña o los 11.150 de la Comunidad Valenciana. Según el Banco de España, la deuda andaluza equivale al 18,8% de su PIB, por debajo de la media nacional del 21%.
En Valencia, la Generalitat que preside Carlos Mazón también se mantiene firme en el rechazo. La propuesta del Ministerio de Hacienda supondría perdonar 11.210 millones de euros, apenas un 19% de su deuda total, que supera los 60.000 millones. El Consell considera que la medida no soluciona la asfixia financiera derivada de la infrafinanciación estructural que arrastra desde 2014 y que cifra en más de 46.000 millones.
Mazón tildó la iniciativa de «chantaje» y criticó que, en la práctica, beneficia sobre todo a Cataluña dentro del acuerdo con ERC. Incluso desde Compromís y Sumar, socios parlamentarios del Gobierno, se considera insuficiente la propuesta y se reclama elevar en 7.000 millones el perdón de deuda para la Comunidad Valenciana.
Mientras tanto, el Ejecutivo central confía en que la medida erosione el frente autonómico del PP. La ministra de Ciencia y líder de los socialistas valencianos, Diana Morant, pidió a Mazón que acepte la condonación y deje de actuar como «delegado de Génova».
Con un total de 338.151 millones de euros de deuda autonómica acumulada en toda España, la decisión de hoy del Consejo de Ministros marcará un nuevo capítulo en el debate sobre la financiación territorial, en el que las comunidades más endeudadas reclaman no solo una quita, sino una reforma profunda del modelo vigente.
