La organización ecologista ha mostrado una gran preocupación sobre los senderos que llevan a la colonia protegida de cria de la gaviota de Audouin, que se encuentran «sin ninguna barrera que impida el acceso y sin ningún cartel de prohibición». Se trata de un ejemplar «muy escaso y raro» que en Ceuta está protegida pon un decreto
Desde el grupo local SEO-Ceuta lamentan tener que denunciar, «nuevamente, que las medidas anunciadas por el Consejero de Medio Ambiente y Servicios Urbanos, Yamal Dris, en el Decreto publicado en el BOCCE del 13 de abril para proteger la colonia de cría de la Gaviota de Audouin no se están ejecutando con la prioridad y urgencia que se requieren».
Aseguran que «este fin de semana, con absoluta perplejidad, se ha podido comprobar in situ que sólo se han instalado tres carteles en la parte superior de la colonia prohibiendo el acceso a los acantilados, pero la medida más necesaria y urgente para salvaguardar el delicado período de incubación en el que está actualmente esta especie protegida no se ha ejecutado y el acceso al sendero que discurre a escasos metros de la colonia sigue abierto, sin ninguna barrera que impida el acceso y sin ningún cartel de prohibición por lo que se ha seguido observando el paso de personas y perros que provocan la alarma en la colonia».
Para los ecologistas, «es increíble y vergonzoso que esté sucediendo la misma historia del año pasado tras un decreto emitido por el Consejero de Medio Ambiente y Servicios Urbanos con carácter de urgencia sin que se ejecutase, en aquella ocasión, ninguna de las medidas anunciadas y que fue la causa del fracaso reproductivo de la colonia. Desde luego si este año la colonia consigue completar su período reproductor con éxito no será precisamente porque los responsables de dicha consejería hayan cumplido con su obligación de ejecutar a tiempo las medidas de protección que tanto precisa la gaviota de Audouin», lamentan.
La gaviota de Audouin está protegida por la legislación europea y estatal, incluida en el Anexo I de la Directiva de Aves (Directiva 2009-147-CE), y en el Catálogo Español de Especies Amenazadas donde se incluye dentro de la categoría de Vulnerable. Además, España juega un “papel clave” en la conservación de esta especie, al albergar cerca del 90% de su población reproductora mundial. La población española “ha caído cerca de una tercera parte en los últimos años, pasando de 21.264 parejas en 2006 a 12.131 en 2017“. Debido a dicho declive, recientemente se ha evaluado el estado de conservación de la especie a nivel mundial, que ha pasado de “‘Casi Amenazada” a “Vulnerable”, de acuerdo a los criterios de amenaza de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN).
