El Juzgado de lo Penal número 2 de Ceuta ha dejado visto para sentencia un juicio en el que A.G.M., acusado de maltrato a su expareja, se encuentra en el centro de la controversia tras haber cambiado de género en el Registro Civil en julio de 2023.
La Fiscalía ha solicitado un año de prisión por un supuesto delito de maltrato en el ámbito de la violencia de género. Sin embargo, de ser declarado culpable, la pena se reduciría a una multa, al considerarse legalmente mujer en el momento de los hechos.
Los incidentes que motivaron la denuncia ocurrieron el 27 de agosto de este año, durante un desayuno en una cafetería de la ciudad autónoma, donde la denunciante se encontró con el acusado y su hijo de siete años. Según su relato, A.G.M. la habría empujado y apartado del menor, mientras que los testigos presentan versiones parciales y contradictorias sobre la agresión.
El acusado, por su parte, negó los cargos y alegó que la situación constituye una “persecución” hacia él, asegurando que su intención es convivir con su hijo y que el niño pertenece a ambos padres. La defensa también argumentó que, tras el cambio de género, no procede aplicar el delito de maltrato en el ámbito de violencia de género.
El juicio contó con testimonios de familiares, un compañero de trabajo del acusado, camareras del local y un trabajador del punto de encuentro familiar. La acusación particular solicitó una condena adicional por coacciones, que no fue admitida por el juez por motivos procesales.
Tras casi seis horas de sesión y varias interrupciones, el magistrado dejó el procedimiento visto para sentencia.
















