El reciente regreso a España de cuatro activistas de la Flotilla de la Libertad-Thousands Madleens ha suscitado un gran interés mediático, destacando la relevancia de su misión en pro de los derechos humanos en Gaza. A su llegada al Aeropuerto Adolfo Suárez-Madrid-Barajas, estos activistas compartieron sus experiencias y reivindicaron el éxito de su movimiento pacífico.
Entre los activistas estaban la diputada regional de Más Madrid, Jimena González, y las colaboradoras María Plata y María Teresa Aracom. Junto a ellas, el activista Yacine Belkaid Ayar completaba el grupo que fue detenido por las autoridades israelíes durante la flotilla que llevaba ayuda humanitaria a Gaza.
El recibimiento a su llegada fue emotivo, con un grupo de diputados y miembros de la formación Sumar que portaban una pancarta instando a poner fin al genocidio en Palestina. Este ambiente de apoyo fue testigo del compromiso social hacia la causa palestina en un contexto global cada vez más complejo.
Jimena González, en una clara declaración de intenciones, afirmó que «las flotillas están siendo un éxito», refiriéndose a su capacidad para generar un cambio significativo en la atención internacional hacia el sufrimiento de los palestinos. Sin embargo, también agregó que el genocidio persiste: «Hay ahora mismo más de 11.000 palestinos mayores de 12 años en prisiones israelíes en territorio ocupado sufriendo torturas y tratos infinitamente peores que los que hemos recibido nosotras».
La activista Teresa Aracom también se pronunció sobre el maltrato que habían sufrido, a pesar de que reconocieron que su experiencia en prisión era solo una pequeña parte del sufrimiento que padecen los palestinos diariamente. «Nos han maltratado, pero más están maltratando a la gente que sigue allí, tantas personas que todavía están allá», comentó.
Además, la ministra de Sanidad, Mónica García, presente durante el recibimiento, subrayó que la actuación de Israel equivale a una violación flagrante de la legalidad internacional. Se refirió a la necesidad de que los responsables rindan cuentas por sus acciones, sugiriendo que la paz no debe alcanzarse sin justicia.
Por su parte, la portavoz de Sumar, Manuela Berguerot, destacó la importancia de las flotillas en mantener el enfoque internacional sobre la situación en Gaza. Manifestó que no se consideran héroes, sino que su acción es parte de una lucha más amplia contra la opresión, el racismo y la islamofobia.
Por otro lado, el activista Yacine defendió que los barcos de la flotilla llevaban exclusivamente materiales humanitarios y resaltó que, lamentablemente, la ayuda que transportaban se había perdido debido a su interceptación por parte de Israel.
En noticias relacionadas, la activista Reyes Rigo, la única integrante española de la Global Sumud Flotilla bajo custodia israelí, ha llegado a un acuerdo con las autoridades israelíes para ser deportada tras pagar una multa. La activista había sido arrestada el 1 de octubre, y su regreso a España fue mobiliario de una amplia cobertura mediática.
La regidora de Unidas Podemos en el Ayuntamiento de Palma, Lucía Muñoz, quien también participó en la flotilla, informó que el cónsul español había comunicado a la familia de Rigo sobre el acuerdo alcanzado. Aunque desde el Ministerio de Asuntos Exteriores no han confirmado oficialmente el acuerdo, se están haciendo gestiones para garantizar la pronta liberación de Rigo.