La defensa del hermano de Pedro Sánchez alega que desgregar a PP, Vox, Manos Limpias y otras acusaciones complicaría la agenda de un juicio ya difícil de cuadrar, y no ve motivos para esta «emancipación».
David Sánchez ha rechazado que las distintas acusaciones populares actúen de forma individual en el juicio que afrontará entre el 9 y el 14 de febrero en la Audiencia de Badajoz por presuntos delitos de prevaricación y tráfico de influencias. El caso investiga su supuesta contratación irregular en la Diputación de Badajoz.
La defensa de David Sánchez, ejercida por el abogado Emilio Cortés, se ha opuesto a la solicitud de «desunificación» de la acción popular, que actualmente ha estado agrupada bajo el paraguas de Manos Limpias, la primera en personarse en la causa.
Riesgo de complicar el calendario judicial
Según el escrito de la defensa, al que ha tenido acceso LA RAZÓN, permitir que cada acusación tenga voz propia en estrados —incluyendo al PP, Vox, Hazte Oír, Abogados Cristianos, Asociación Liberum e Iustitia Europa— «complicaría» aún más la intención de la Audiencia de cuadrar las fechas del juicio.
La defensa argumenta que ya es complicado «hacer concordar» las agendas de los diferentes letrados, dada la cantidad de acusados, testigos y peritos, lo que llevó al tribunal a considerar incluso sesiones vespertinas y hasta un sábado. Emilio Cortés subraya que las acusaciones populares han venido actuando juntas «sin queja» y no ve motivos para que intenten «emanciparse nada menos que en los prolegómenos de la celebración» de la vista oral.
La defensa recuerda que la resolución que obligó a las acusaciones populares a actuar bajo la representación de Manos Limpias es «firme» y «sigue rigiendo en este momento procesal».
Petición de pena
Las acusaciones populares que buscan actuar por separado reclaman para David Sánchez una condena de tres años de prisión y una multa de 32.000 euros. Es relevante destacar que en este juicio, al igual que en otros casos mediáticos, la Fiscalía no presenta acusación.
La celebración del juicio, fijada inicialmente entre el 9 y el 14 de febrero, podría cambiar, ya que el letrado de Manos Limpias ha solicitado una modificación de calendario por coincidirle con otros señalamientos. El tribunal ha solicitado a las partes sus agendas para intentar fijar nuevas fechas.














