El ente público que gestiona el Parque Marítimo del Mediterráneo podría estar inmerso en una situación jurídica delicada. Según la información proporcionada a este medio de comunicación, no constaría el depósito de las cuentas anuales de la sociedad en el Registro Mercantil durante casi diez ejercicios consecutivos, un extremo que, de confirmarse, tendría implicaciones de gran alcance para la validez de los acuerdos adoptados en ese periodo.
Una situación que, de verificarse, supondría un incumplimiento de la normativa mercantil
La Ley de Sociedades de Capital establece la obligación de formular, aprobar y depositar las cuentas anuales dentro del plazo legal. Esta obligación garantiza la transparencia y el control interno de las sociedades, especialmente cuando se trata de entidades públicas que gestionan recursos de carácter patrimonial.
Si finalmente se confirma que la sociedad no ha cumplido con esta obligación durante varios años, estaríamos ante una vulneración prolongada del deber de publicidad registral, sujeta además al régimen sancionador previsto en la normativa mercantil.
Riesgo de nulidad de acuerdos, sujeto a verificación
La posibilidad de que no se hayan depositado las cuentas durante casi una década abre la puerta a un debate jurídico relevante:
¿podrían considerarse nulos los acuerdos societarios adoptados durante este periodo?
Expertos consultados señalan que, si la ausencia de cuentas fuese real y acreditada, las decisiones adoptadas por el consejo de administración y la junta general podrían verse afectadas por falta de transparencia e información suficiente, elementos esenciales para la validez de los actos societarios.
Entre los acuerdos potencialmente comprometidos se incluirían:
- contratos y concesiones administrativas,
- modificaciones internas,
- nombramientos,
- decisiones económicas estratégicas.
Cualquier declaración de nulidad, en su caso, dependería de una revisión jurídica detallada y de la confirmación efectiva de la falta de depósito.
Implicaciones para los órganos de administración y supervisión
Si el incumplimiento fuera verificado, los órganos encargados de la gestión y supervisión de la sociedad podrían enfrentarse a posibles responsabilidades mercantiles, administrativas o patrimoniales derivadas del incumplimiento de sus obligaciones contables.
La ley exige a los administradores actuar con la diligencia debida, garantizando el cumplimiento de los deberes legales y la salvaguarda de la transparencia contable.
Eventuales consecuencias en la actividad contractual y en la plantilla
De confirmarse la falta de depósito durante un periodo tan amplio, las consecuencias podrían afectar de manera significativa a la actividad del Parque Marítimo:
- Contratos y concesiones podrían verse sometidos a revisión si se determina que fueron aprobados sin el marco contable adecuado.
- Nombramientos y decisiones laborales podrían quedar en situación de inseguridad jurídica.
- Determinadas decisiones económicas adoptadas en estos años podrían ser objeto de impugnación.
Todo ello dependería, en última instancia, de la verificación documental y del análisis jurídico concreto de cada acuerdo.
Expertos reclaman una regularización urgente y una auditoría externa
Los especialistas consultados coinciden en la necesidad de actuar con rapidez para clarificar la situación. Entre las medidas propuestas destacan:
- Verificar oficialmente la situación de los depósitos contables mediante consulta registrada.
- En caso de confirmarse la falta de presentación, proceder al depósito inmediato de las cuentas pendientes, incluso mediante reconstrucción contable.
- Encargar una auditoría externa independiente que determine el estado real de la sociedad y el alcance jurídico de las decisiones adoptadas.
- Revisar de forma preventiva los acuerdos aprobados durante el periodo en cuestión.
- Reforzar los mecanismos internos de control y supervisión para evitar situaciones similares en el futuro.
Mientras no se aclare oficialmente esta circunstancia, el Parque Marítimo queda bajo la sombra de un posible escenario de inseguridad jurídica que podría afectar a su funcionamiento, a sus relaciones contractuales y a la gestión de un espacio público de gran relevancia para la ciudad.















