El 1 de noviembre es un día especial para Ceuta.
Dos tradiciones se unen en una misma fecha. Lo cristiano y lo autóctono. El día de Todos los Santos y la Mochila forman parte indisoluble de la historia de Ceuta.
Y para celebrar ambas citas, los caballas asisten al cementerio a llevar flores a sus difuntos, y a continuación, en grupos de familiares y amigos, acampan en lugares naturales y pasan el día comiendo y hablando, eso sí, si la lluvia lo permite.
La Mochila en sí, esa que ni el gallo ni la gallina se la come, pero sí mi barriguita, puede contar con un inventario tan diferente como original: desde las chirimoyas hasta cualquier tipo de fruto seco, o cualquier alimento que sea del gusto del propietario de la Mochila.
Podemos estar orgullosos de una fiesta original en la que el recuerdo de los que ya no están se mezcla con la importancia de compartir en familia, de reunirse con la excusa de comer. Una fiesta que resiste a pesar de la imposición del truco o trato anglosajón que muy poco tiene que ver con nuestras raíces.
Otro motivo también reseñable de esta festividad, es el entorno natural, enseñar a los más pequeños y pequeñas que respeten la naturaleza.
Eso significa comer entre árboles como si fuera el salón de casa, lo que conlleva que al igual que no se tira basura al suelo del hogar de ladrillos, tampoco al de tierra y hojas.
Llueva o no, desde El Foro de Ceuta les deseamos feliz día de la Mochila.
