Detrás de cada desplazamiento de la AD Ceuta hay un nombre propio: Hassan Larbi. Con la discreción de quien trabaja por amor al club y a su gente, Hassan se ha convertido en el verdadero motor que hace posible que la afición caballa acompañe a su equipo a lo largo y ancho de España.
Su historia comenzó hace años, cuando la AD Ceuta militaba en Tercera División. Conductor de autobuses y trabajador del sector del transporte, un grupo de amigos le propuso organizar una excursión para apoyar al equipo. “Aún recuerdo aquel primer viaje a Huelva”, confiesa. Aquella experiencia fue el punto de partida de una aventura que, desde entonces, no se ha detenido.

Siempre que el calendario lo permite, Hassan organiza los viajes de manera que los desplazamientos puedan hacerse en el mismo día, pensando en aquellos aficionados que trabajan y necesitan volver a tiempo. Y en el camino, nunca ha estado solo: nombres como Abdeselam Mohamed Hussein, que con su cámara inmortaliza cada acción; Mohamed Hichou, compañero inseparable de tantas excursiones; o los fieles Bilal , Maimon y Kamal, que no faltan a la cita, forman parte de esa pequeña gran familia de carretera.

Hay viajes que quedan marcados para siempre. Entre los más especiales, Hassan recuerda con cariño el desplazamiento a Madrid, con pernoctación incluida, cuando la AD Ceuta se enfrentó al Real Madrid Castilla. También la excursión a Mérida, seguida al día siguiente por otra a Lucena, para animar al equipo filial, figura entre sus favoritas. Pero no todas las experiencias han sido fáciles. Hubo un desplazamiento especialmente duro: cuando el seguidor más fiel, Maimon Mohamed Amar, sufrió un amago de infarto. “Fue un susto tremendo, un momento muy difícil para todos”, recuerda.

En estas travesías, Hassan reconoce la importancia de contar con la ayuda de Bernardo Martín López (Berna): “Gracias a su experiencia nos ayuda bastante en la organización, es un apoyo imprescindible”, afirma con gratitud.
La coordinación de un viaje no es sencilla. Hay que cuadrar barcos, autobuses, horarios, entradas… y estar preparado para cualquier imprevisto. “Mi trabajo no se limita a reservar billetes —explica—. Viajo con ellos, estoy pendiente del grupo en todo momento y resuelvo lo que haga falta. Esa cercanía es lo que marca la diferencia”.
Por eso, Hassan no olvida tampoco la colaboración del presidente de la AD Ceuta, Luhay Hamido, “siempre al otro lado del teléfono cuando se le necesita”, ni el esfuerzo de Marta Nogueras en la gestión de entradas, clave para que todo salga bien.
Y al final, entre recuerdos, anécdotas y kilómetros recorridos, Hassan resume lo que siente en pocas palabras, con la emoción de quien lo vive desde dentro:
“Para mí, la AD Ceuta no es solo un equipo, es una familia. Organizar estos viajes y ver a nuestra afición acompañando al club allá donde vaya es un orgullo que no se puede explicar con palabras”.
