La jueza que instruye el caso del incendio en dos discotecas de Murcia, ocurrido el 1 de octubre de 2023 y que causó la muerte de 13 personas, ha abierto por primera vez la posibilidad de investigar la responsabilidad del Ayuntamiento en la tragedia, como habían solicitado las familias de las víctimas durante los últimos dos años.
Hasta ahora, el juzgado de Instrucción número 3 de Murcia había citado a siete personas como investigadas por posibles delitos de homicidio por imprudencia. Con la nueva providencia, se abre la vía para que los concejales y otros responsables municipales puedan ser imputados por presunta prevaricación administrativa. La jueza ha ampliado además tres meses más la instrucción, hasta el 1 de abril de 2026.
“Es un avance, las familias están contentas”, declaró José Manuel Muñoz Ortín, abogado de allegados a cuatro de los fallecidos, quien había solicitado reiteradamente la investigación de los responsables municipales. La providencia, dictada el 29 de diciembre, señala que se llevarán a cabo diligencias para esclarecer la posible responsabilidad penal de autoridades y funcionarios del Ayuntamiento de Murcia en los fallecimientos ocurridos en la discoteca Fonda Milagros.
Aunque el escrito no detalla las actuaciones concretas, el abogado de las familias considera que deberían declarar, al menos, el actual concejal de Urbanismo, Antonio Navarro (PP), y su antecesor, Andrés Guerrero (PSOE). Ambos ofrecieron días después del incendio una rueda de prensa conjunta en la que revelaron irregularidades administrativas: mientras que la sala Teatre contaba con licencia de actividad, Fonda Milagros, donde murieron las 13 víctimas, no existía legalmente, y la orden de cese de Teatre nunca se ejecutó.
Según los familiares, la falta de regularización de las licencias y los incumplimientos en seguridad y medidas antiincendios evidencian una responsabilidad directa del Ayuntamiento en el trágico suceso.
Además de los concejales, las familias pidieron que se investigue a otros funcionarios municipales, como el inspector del Servicio Técnico de Obras y Actividades, el jefe de Servicio de Intervención y Disciplina de Actividades y el jefe de Servicio de Protección Civil y Prevención de Incendios. La jueza deberá decidir ahora qué actuaciones llevará a cabo y si tomará declaración a estas personas como investigados.
Actualmente, están imputados por homicidio por imprudencia el gerente de Fonda Milagros, tres responsables de Teatre, el ingeniero que proyectó la división de la nave, el DJ de la fiesta y el propietario de la máquina de chispas que podría haber originado el fuego.

















