El tradicional desfile de la Fiesta Nacional, presidido por el rey Felipe VI, estuvo este año marcado por un ambiente de fuerte tensión política. Durante el acto, celebrado en Madrid y que conmemoraba además el 20º aniversario de la Unidad Militar de Emergencias (UME), se registraron abucheos dirigidos al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, así como la ausencia de seis presidentes autonómicos.
Uno de los momentos más comentados fue el plante del líder de Vox, Santiago Abascal, al Rey, quien abandonó la tribuna antes de que comenzara el saludo final al monarca. Por su parte, la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, también generó titulares con sus críticas al Gobierno, a pesar de compartir espacio institucional con Sánchez y el resto de autoridades.
La celebración, que tradicionalmente busca simbolizar la unidad y el reconocimiento a las Fuerzas Armadas, se vio así envuelta en la crispación política que atraviesa el país. Aun así, el desfile transcurrió con normalidad, con la participación de más de 4.000 efectivos y un público que llenó el Paseo de la Castellana para presenciar los actos conmemorativos.