Francia ha elevado su nivel de alerta ante la posibilidad de atentados islamistas durante las próximas fiestas navideñas. Laurent Nuñez, ministro del Interior, ha ordenado la implementación de “medidas de seguridad excepcionales” tras detectar un aumento de la amenaza terrorista.
Desde hace días, los ministerios de Interior, Asuntos Exteriores y Defensa coordinan sus esfuerzos para garantizar una “respuesta urgente” frente a cualquier intento de ataque. Nuñez envió una nota oficial a prefectos y responsables de seguridad en todo el país, subrayando la gravedad de la situación: “Debemos mantener una vigilancia máxima, reforzada con medidas policiales y militares en todo el territorio nacional”.
Las festividades navideñas, con concentraciones masivas en mercados, lugares de culto y espacios públicos, representan un momento crítico. Por ello, se implementarán prohibiciones especiales, restricciones de circulación y protección reforzada para peatones y visitantes.
Aunque la amenaza de organizaciones terroristas internacionales se considera “descartada”, las autoridades alertan sobre la posible influencia de la propaganda islamista internacional sobre la población musulmana francesa, que oscila entre 6 y 8 millones de personas. Según la DGSI, los grupos extremistas promueven la idea de atacar “a los infieles” durante la Navidad, considerando estos espacios como objetivos privilegiados.
La policía ya ha intensificado la vigilancia en puntos emblemáticos, como la Torre Eiffel y otros lugares turísticos y de concentración masiva, en un esfuerzo por garantizar la seguridad de residentes y visitantes durante las próximas semanas.
















