El presidente de la Ciudad Autónoma y del Partido Popular en Ceuta, Juan Vivas, ha participado este lunes en el tradicional brindis navideño de la formación, celebrado en la sede del partido con afiliados y simpatizantes. El acto, marcado por el ambiente festivo, la música de panderetas y mesas repletas de aperitivos, sirvió también para que el dirigente hiciera balance de más de 25 años de trayectoria política.
Antes de iniciar la convivencia, tomaron la palabra el secretario general del PP ceutí, Guillermo Martínez, y el propio Vivas, quien centró su intervención en el agradecimiento, la reflexión y la mirada puesta en el futuro. Entre los mensajes más destacados, el presidente dejó entrever la posibilidad de un relevo al frente del partido, subrayando que los cambios forman parte de un proceso natural.
“El relevo es una ley natural y positiva. Lo mejor está por venir, con independencia de quién esté al frente del Partido Popular en los próximos años”, afirmó, tras repasar algunos de los momentos más complejos de su largo mandato.
Un agradecimiento a 25 años de servicio
Visiblemente emocionado, Vivas expresó su gratitud a quienes le han acompañado durante este camino político, asegurando que gobernar Ceuta ha sido “el sueño de servir a mi tierra y a la gente a la que quiero”. Definió la experiencia como “de un valor incalculable”, aunque reconoció que aún quedan retos por afrontar.
“Quedan muchas cosas por hacer. No todo lo hemos hecho bien y pido perdón por ello”, admitió, sin dejar de recalcar que su gestión siempre ha tenido como prioridad a los ciudadanos. En ese sentido, defendió que el Gobierno local ha antepuesto los intereses de Ceuta a los del propio partido.
Ceuta como forma de servir a España
Durante su intervención, el presidente volvió a insistir en su visión de Ceuta como un proyecto inseparable de España. “No hay mejor manera de querer y servir a España que sirviendo a Ceuta”, aseguró, recordando la importancia de reforzar la presencia de la ciudad a nivel nacional y europeo.
Vivas estructuró su acción de gobierno en cuatro pilares fundamentales. El primero, la unidad de todos los ceutíes en torno a su españolidad, “recen como recen y se llamen como se llamen”. El segundo, el modelo de convivencia multicultural, que defendió frente a los discursos que lo cuestionan.
“Esta diversidad no es un problema, aunque algunos intenten convertirla en uno por intereses electoralistas. El corazón de la gente dice lo contrario”, señaló, invitando a quienes duden a conocer la realidad de la ciudad de primera mano.
Lealtad institucional y vocación de servicio
La lealtad institucional fue el tercer eje destacado por el dirigente popular, al considerarla clave para afrontar los retos específicos de Ceuta. El cuarto, la vocación política, imprescindible —dijo— para transmitir confianza y evitar que la ciudad caiga en el derrotismo.
“El balance es satisfactorio”, aseguró Vivas, aunque sin negar la existencia de asuntos pendientes. Entre los principales logros de su gestión citó la mejora de los suministros básicos, la modernización de infraestructuras, el avance en equipamientos, la mejora de las comunicaciones con la península y la puesta en valor del patrimonio histórico.
También destacó la reducción de la dependencia de decisiones externas, el aumento del 50% en el número de afiliados del PP durante estos 25 años y los avances en el régimen económico y fiscal de la ciudad.
Mirada al futuro
Por último, el presidente volvió a apostar por un modelo de desarrollo en el que Ceuta tenga mayor peso en España y en Europa, basado en una economía “verde, inteligente y azul”. Recordó además los momentos más críticos vividos durante su mandato, como las crisis de 2011 y 2021, la pandemia del Covid-19 y la entrada masiva de migrantes por la frontera.
“Servir a Ceuta es fácil”, concluyó. “Es la mejor ciudad de toda España, y eso se demuestra especialmente en los momentos difíciles”.














