El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha emitido un mensaje a través de su red social, donde expresa sus preocupaciones sobre el recuento de votos en Honduras. En su declaración, Trump asegura que «parece» que este país centroamericano está tratando de alterar los resultados de las elecciones presidenciales en curso.
La afirmación de Trump va acompañada de una clara advertencia: «Si lo hacen, habrá problemas». Este comentario se produce en un contexto tenso, donde el recuento de votos ha revelado un empate técnico entre los principales candidatos.
Hasta el momento, con un 57,03% de las papeletas escrutadas, el candidato del Partido Nacional Conservador, Nasry Asfura, lidera con 749,022 votos (39,91%), mientras que su rival del Partido Liberal, Salvador Nasralla, le sigue de cerca con 748,507 votos (39,89%). Esta escasa diferencia de 515 votos no ha permitido que ninguno de los candidatos se declare vencedor de los comicios.
En Honduras no se realiza una segunda vuelta en las elecciones, por lo que el candidato que obtenga la mayoría de sufragios será declarado ganador. Esta situación ha provocado una gran tensión entre los electores, quienes esperan con ansiedad el anuncio oficial de los resultados finales.
Trump ha subrayado la importancia de que el Consejo Nacional Electoral (CNE) complete el proceso electoral y ha insistido en que la voluntad del pueblo, expresada a través de las urnas, debe ser respetada. «¡La democracia debe prevalecer!», ha afirmado en su mensaje. No obstante, también ha dejado claro que solo habrá apoyo económico hacia Honduras si Asfura resulta como el ganador.
El CNE, por su parte, ha confirmado que el sistema de Transmisión de Resultados Electorales Preliminares (TREP) ha finalizado, con más del 50% de las actas escrutadas. Sin embargo, continúa el recuento de votos, el cual se puede seguir en tiempo real a través de la página web oficial del ente electoral. La presidenta del CNE, Ana Paola Hall, ha pedido a la población que mantenga la calma y la paciencia mientras se culmina el proceso.
El sistema electoral en Honduras ha mostrado avances considerables a lo largo de los años, pero a pesar de ello, los resultados parecen tardar en confirmarse. El CNE tiene hasta 30 días para anunciar los resultados definitivos relacionados con las elecciones, aunque si el recuento es procesado rápidamente, se podría tener una declaración oficial antes de la Navidad.
Desde el partido de Nasralla, se han mostrado optimistas respecto a los resultados. Tomás Lozano, coordinador de la Comisión Nacional de Campaña del Partido Liberal, ha declarado que considera «muy hipotética» una derrota electoral para su candidato. Asegura que la tendencia apunta hacia la victoria de su partido, y espera que en los días siguientes se evidencie un crecimiento en el apoyo hacia Nasralla.
Por otro lado, Rixi Moncada, candidata del Partido Libertad y Refundación (Libre), ha manifestado que su candidatura aún tiene posibilidades en la contienda electoral. A pesar de estar en una posición desfavorable, denuncia la supuesta «injerencia extranjera» en el proceso electoral, atribuyendo parte de los problemas al sistema venidero que ha sido impuesto por el bipartidismo.
La política hondureña sigue siendo un campo en el que intervenciones externas y conflictos internos son comunes. La atención internacional se centra en el resultado de estas elecciones y en cómo se desarrollará la situación tras el anuncio oficial de los resultados finales.
















