Según fuentes cercanas a los protagonistas, el exasesor Koldo llegó a plantear al exministro Ábalos la posibilidad de fugarse a países como Colombia o Perú, como parte de una estrategia extrema ante las investigaciones en su contra. Sin embargo, Ábalos habría rechazado esa opción, afirmando que «nunca quiso huir» y que su intención es enfrentar el proceso judicial respetando la legalidad.
El papel de Koldo ha sido determinante en la estrategia de defensa del exministro, asesorando sobre los movimientos legales y la postura que ambos mantendrán durante todo el procedimiento. Pese a la polémica sugerencia de fuga, Ábalos se mantiene firme en su decisión de colaborar con la justicia y demostrar su «inocencia», según las mismas fuentes.
En cuanto a un posible pacto con la Fiscalía, se indica que todavía no se ha tomado una decisión definitiva y que, en teoría, «se puede hacer cinco minutos antes del juicio», lo que refleja la flexibilidad de la estrategia legal planteada por sus asesores. Este enfoque busca mantener abiertas todas las opciones hasta el último momento procesal, sin comprometer la postura de defensa que han construido.
Este caso se suma a una serie de investigaciones que han puesto en el centro del debate político y mediático a Ábalos, generando un intenso seguimiento tanto por parte de la opinión pública como de los analistas legales. La relación entre el exministro y su exasesor Koldo continúa siendo objeto de atención, especialmente tras conocerse la sugerencia de huida, que añade un nuevo elemento a la narrativa del caso.
Por ahora, la expectativa se centra en los próximos pasos judiciales y en la manera en que Ábalos y su equipo afrontarán el juicio, manteniendo la defensa de su inocencia mientras se evalúan posibles acuerdos con la Fiscalía.















