La reciente operación de desalojo de 400 personas que ocupaban el antiguo instituto B9 de Badalona ha provocado un nuevo choque político en Cataluña. Carles Puigdemont, líder de Junts, ha acusado al presidente de la Generalitat, Salvador Illa, de “esconder la cabeza” y de mostrar “irresponsabilidad y dejadez” al no ofrecer una alternativa habitacional para los desalojados.
El ex ‘president’ ha difundido su mensaje a través de las redes sociales antes de la comparecencia navideña de Illa, buscando subrayar la falta de liderazgo del jefe del Ejecutivo catalán. Puigdemont se ha referido también al enfrentamiento vecinal que se produjo cuando algunos de los desalojados intentaron ocupar un albergue municipal cerrado, generando tensiones entre vecinos.
Por su parte, Salvador Illa ha defendido la actuación del Govern, subrayando que “la ley se cumple” y que las resoluciones judiciales se han ejecutado para garantizar la convivencia. El presidente ha asegurado que su equipo trabaja con discreción para resolver la situación y ha hecho un “llamamiento a la serenidad y la calma” a los vecinos de Badalona, advirtiendo que quien incumpla la ley se enfrentará a sanciones penales.
El desalojo fue llevado a cabo por los Mossos d’Esquadra tras la orden judicial, cumpliendo así con la normativa vigente y generando un debate político y social que continúa tensionando el panorama catalán.


















