El presidente de Estados Unidos insiste en que la intervención terrestre contra cárteles de narcotráfico en Venezuela y Colombia comenzará «muy pronto», tras los operativos navales en el Caribe.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, volvió a utilizar un lenguaje sumamente duro y amenazante para referirse a la inminente intervención militar terrestre en Venezuela y Colombia como parte de su autodenominada guerra contra el narcotráfico.
Durante una reunión con su gabinete en la Casa Blanca este martes, Trump reafirmó la estrategia de llevar los ataques, hasta ahora limitados al mar en la Operación Lanza del Sur, hacia tierra firme.
Las declaraciones más contundentes del mandatario se produjeron al asegurar que los ataques por tierra en Venezuela comenzarán «muy pronto»:
«En tierra es mucho más fácil. Conocemos las rutas que toman. Lo sabemos todo sobre ellos. Sabemos dónde viven. Sabemos dónde viven los malos. Y vamos a empezar con eso también muy pronto. Acabaremos con esos hijos de perra.”
El presidente ha enmarcado estos ataques como necesarios para «salvar miles de vidas» que se pierden a causa de las drogas en Estados Unidos.
El foco en Venezuela y Colombia
Trump no solo apuntó a Venezuela, sino que también incluyó a Colombia en su amenaza, señalando que cualquier país que trafique con drogas ilegales hacia EE.UU. «está sujeto a ser atacado». El mandatario sostuvo que Colombia es «susceptible» de ser atacada por tener «fábricas enteras de cocaína».
El secretario de Guerra, Pete Hegseth, respaldó al presidente y a los comandantes del Pentágono, asegurando que «detendremos cualquier amenaza» y que se ha tomado la decisión correcta al «eliminar la amenaza» en operativos anteriores en el Caribe.
















