El año se despide en el Alfonso Murube con un partido de máxima exigencia. La AD Ceuta recibe a la UD Las Palmas en el último encuentro de un 2025 histórico para el conjunto caballa, un curso que ha devuelto a la ciudad autónoma al fútbol profesional tras 45 años de ausencia y que ha situado al club como una de las grandes revelaciones de la categoría.
El equipo dirigido por José Juan Romero llega a esta cita con 25 puntos en su casillero, números de playoff tras 17 jornadas y la sensación de ser un bloque sólido, competitivo y con identidad propia. El técnico sevillano, pieza clave del proyecto, ha conseguido construir una plantilla equilibrada en la que todos los jugadores aportan, manteniendo un alto nivel incluso en los momentos de mayor exigencia del calendario.
El Ceuta afronta el choque reforzado anímicamente tras sus recientes victorias en casa ante rivales directos como Almería y Burgos, lo que eleva su rendimiento como local a 18 puntos de 24 posibles. Romero recupera a Anuar tras cumplir sanción, aunque no podrá contar con Bassinga, cedido precisamente por Las Palmas, ni con Manu Sánchez, que sigue apartado varias semanas. Pese a las bajas, el estado general del plantel es óptimo y no se esperan grandes cambios en un once que ya funciona casi de memoria, con dudas puntuales en el eje del centro del campo y las bandas ofensivas.
Enfrente estará una UD Las Palmas obligada a reaccionar tras encadenar tropiezos ante Castellón y Mirandés. El conjunto canario necesita sumar para no descolgarse de la pelea por el ascenso directo, pero tendrá que hacerlo en un estadio donde el Ceuta se hace fuerte y eleva su nivel competitivo.
En el equipo amarillo, José Antonio Caro debutará como titular en la portería tras la expulsión de Dinko Horkaš, mientras que en ataque se abre la posibilidad de que Iván Gil gane protagonismo en detrimento de Jonathan Viera, acompañando a Manu Fuster, Pejiño y Luković. La otra incógnita está en el lateral derecho, con Marvin y Viti disputándose el puesto.
El desplazamiento de Las Palmas se vio afectado por la borrasca Emilia, que ha castigado Canarias durante la última semana. El vuelo chárter con destino a Tetuán no pudo despegar en la jornada del sábado, aunque el club confía en viajar a primera hora del domingo. A pesar del retraso, no se prevé que peligre la celebración del encuentro, fijado para las 21:00 horas (peninsular).
Ceuta cerrará así un año inolvidable en casa, con la mirada puesta en consolidar el proyecto en 2026 y seguir haciendo ruido en una Segunda División que ya reconoce al conjunto caballa como uno de sus protagonistas.














