El Partido Popular ha logrado una victoria rotunda en las elecciones autonómicas celebradas este domingo 21 de diciembre de 2025, consolidándose como la fuerza más votada en una región históricamente socialista. Sin embargo, el resultado deja un sabor agridulce en la sede de Génova: con 29 escaños, la candidata María Guardiola mejora su marca de 2023, pero se queda a cuatro diputados de la mayoría absoluta (fijada en 33), lo que la obliga de nuevo a negociar con un Vox reforzado para evitar el bloqueo.
Debacle histórica del PSOE de Sánchez
La otra cara de la moneda es la caída sin precedentes del PSOE, liderado por Miguel Ángel Gallardo. Los socialistas han sufrido un desplome que desde el PP nacional califican de «mérito exclusivo de Pedro Sánchez». El PSOE ha pasado de 28 a 18 escaños, perdiendo 10 representantes y marcando una distancia de 17 puntos con los populares.
Desde el PP nacional han sido tajantes: «La derrota no es de Gallardo, es del presidente del Gobierno». Reprochan a Sánchez no haber comparecido anoche para asumir el fracaso en una comunidad que ha dado la espalda a sus políticas.
Vox duplica su fuerza y marca sus condiciones
Vox ha sido la gran sorpresa de la noche electoral. El partido de Santiago Abascal ha pasado de 5 a 11 escaños, duplicando su presencia en la Asamblea de Extremadura. Esta subida otorga a la formación una posición de fuerza que Abascal ya advirtió que no regalará.
Entre los puntos que Vox pondrá sobre la mesa de negociación destacan:
- Revisión de las políticas migratorias y de género.
- Oposición al Pacto Verde y defensa del mundo rural.
- Mantenimiento de las centrales nucleares (como Almaraz).
- Derogación de la Ley de Memoria Democrática a nivel regional.
María Guardiola, en su primera comparecencia, lanzó un mensaje directo a la formación de derecha: «En sus manos está favorecer el cambio y no bloquear el futuro de Extremadura».
El escaño número 30 se escapó en Cáceres
La noche electoral se vivió con máxima tensión en la provincia de Cáceres, donde el PP depositaba sus esperanzas de alcanzar los 30 escaños. Finalmente, una diferencia de tan solo 244 votos impidió que ese diputado cayera del lado popular, terminando en manos del PSOE. En esta provincia, el PP se ha consolidado con 13 parlamentarios, frente a los 8 del PSOE y los 5 de Vox.
Con este escenario, Extremadura inicia una semana de intensos contactos políticos. La sombra de una repetición electoral o de un pacto complejo sobrevuela el Palacio de las Cigüeñas, mientras María Guardiola apela a la responsabilidad de Vox para materializar el mandato de las urnas.
















