Los facultativos convocan paros del 9 al 12 de diciembre. La raíz del conflicto es el hartazgo con la reforma del Estatuto Marco, que, según denuncian, ignora la responsabilidad clínica y mantiene la precariedad en el sector.
Diciembre llega con la sanidad pública bajo una doble presión: el pico asistencial de la gripe y una grave crisis laboral. Los médicos, representados por las organizaciones CESM y SMA, han decidido dar un paso al frente y convocar una huelga nacional con un mensaje directo al Ministerio de Sanidad, encabezado por Mónica García.
El conflicto se ha abierto en dos frentes simultáneos:
- Huelga de Médicos (CESM y SMA): Tendrá lugar a partir de mañana, lunes 9 de diciembre, hasta el jueves 12 de diciembre (cuatro días consecutivos) y afecta a facultativos de toda España.
- Huelga Indefinida Sanitaria: Los sindicatos del Ámbito de Negociación (Satse, CCOO, UGT, CSIF y CIG-Saúde) han anunciado paros indefinidos de todo el personal sanitario todos los martes a partir del 27 de enero.
Qué exigen los médicos a Mónica García
Las principales críticas se centran en el borrador de la reforma del Estatuto Marco, la normativa que regula las condiciones del personal estatutario. Los médicos denuncian que la propuesta ministerial es insuficiente y no aborda los problemas estructurales del sistema:
- Especificidad Médica: No reconoce la especificidad del médico ni su responsabilidad clínica.
- Jornada y Guardias: Mantiene las guardias de 24 horas mal remuneradas y sin el descanso compensatorio suficiente, además de no computar las horas de guardia para la jubilación.
- Retribuciones y Formación: No adapta las retribuciones al nivel formativo y a la carga asistencial real.
- Precariedad: No frena la temporalidad ni la precariedad en los contratos.
- Seguridad: No contempla medidas contundentes contra el aumento de las agresiones a sanitarios ni resuelve el problema del intrusismo profesional.
Además, el colectivo reclama un Estatuto del Médico propio, negociado al margen de otros colectivos, que reconozca las particularidades de su trabajo.
¿Por qué estalla el conflicto ahora?
Los sindicatos aseguran que el estallido se produce por el hartazgo tras casi tres años de negociaciones sin avances. Acusan al Ministerio de Sanidad de retrasar y dilatar las conversaciones, y de mantener reuniones «paralelas y desleales» con otras organizaciones, ignorando a la mesa de negociación oficial.
La secretaria estatal del sector Salud de UGT, Begoña Ballell, fue tajante: «El Ministerio no tiene intención de aprobar un Estatuto Marco justo, útil y beneficioso para todos los profesionales». Los profesionales advierten que la falta de médicos, las jubilaciones inminentes y la pérdida de talento están empujando el sistema sanitario «hacia un camino sin retorno».
La respuesta del Ministerio
El Ministerio de Sanidad defiende que el Estatuto Marco sí incluye mejoras reales dentro de su marco competencial:
- Jornada: Reducción de la jornada máxima semanal a 45 horas y guardias de 17 horas en algunos supuestos.
- Clasificación: Reordenación de la clasificación profesional para reducir la precariedad.
No obstante, Mónica García insiste en que no puede fijar salarios concretos, ni aprobar la jornada de 35 horas, ni establecer una jubilación anticipada por ley estatal, ya que estas decisiones corresponden a las comunidades autónomas. Para el Ministerio, bloquear el acuerdo por estos puntos supondría «perder una oportunidad histórica».
El conflicto ya ha escalado a la esfera política, con el PP exigiendo a Pedro Sánchez la retirada del borrador. Lo que es innegable es que, con la huelga decidida, la sanidad pública entra en uno de sus momentos más delicados.















