Las fuerzas de seguridad marroquíes han llevado a cabo en las últimas 24 horas un amplio operativo para impedir el acercamiento de entre 300 y 400 personas de origen subsahariano a la valla fronteriza con Ceuta, dispersándolas de las zonas más próximas al perímetro.
Se trata de la intervención más relevante realizada por las autoridades del país vecino tras varios días de creciente presión migratoria en el entorno del vallado, una situación que había derivado en un aumento significativo de los intentos de entrada irregular.
Por el momento no consta que se hayan producido heridos, aunque tampoco se ha facilitado información oficial detallada sobre el operativo desarrollado durante la pasada noche.
Concentración en los montes marroquíes
Según fuentes oficiosas, en los últimos días se había detectado la acumulación de alrededor de 500 migrantes en los montes situados en territorio marroquí, organizados en distintos grupos con la intención de intentar el cruce de la frontera.
Estas concentraciones habían sido detectadas tanto en reconocimientos aéreos realizados por el helicóptero del Instituto Armado como a través de los sistemas de vigilancia y las cámaras térmicas del denominado equipo de búhos.
Aumento de los intentos de entrada
El número de entradas irregulares se había incrementado de manera notable en jornadas recientes. Solo durante la noche del sábado se contabilizó el acceso de unas 40 personas, sin incluir los grupos que fueron rechazados a pie de valla.
Días antes, coincidiendo con el puente de la Constitución y la Inmaculada, se activó una alerta ante un intento de entrada masiva anunciado en redes sociales, que finalmente no llegó a materializarse.
Las condiciones meteorológicas adversas, con lluvias y fuertes rachas de viento, han contribuido a intensificar la presión sobre un perímetro fronterizo que presenta importantes deficiencias estructurales, facilitando los acercamientos por distintos puntos del vallado.
A esta situación se ha sumado la persistente presión migratoria por vía marítima, con salidas constantes pese al mal estado del mar y el oleaje provocado por la borrasca Emilia durante el fin de semana.
Algunos de los propios migrantes han difundido a través de sus teléfonos móviles imágenes de su llegada al Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI).
















