La Policía Nacional ha detenido en Melilla a un hombre acusado de vigilar y acosar a su exesposa mediante el uso de tecnología de localización inalámbrica. El arrestado presuntamente instaló dispositivos de seguimiento tanto en el coche de la víctima como en el de su hermana para monitorizar todos sus movimientos en tiempo real.
El hallazgo: dispositivos adheridos con silicona
La investigación se inició cuando la hermana de la afectada detectó dos objetos extraños adheridos a los bajos de su vehículo y al de su hermana. Tras presentar la denuncia, los agentes del Grupo de Delitos Tecnológicos, en colaboración con la Unidad de Familia y Mujer (UFAM), analizaron los aparatos.
Los especialistas confirmaron que se trataba de localizadores de alta autonomía que funcionan mediante tecnología de transmisión de datos de baja energía. A diferencia de los GPS convencionales, estos sistemas aprovechan la conexión de teléfonos móviles cercanos para retransmitir la ubicación, lo que dificultaba su detección y maximizaba la duración de su batería.
Un año de encuentros «inexplicables»
La víctima, que se había separado del detenido hace algo más de un año, relató a la policía que se encontraba con su exmarido de manera reiterada en numerosos lugares, tanto en Melilla como en Marruecos. Esta situación, que carecía de explicación lógica hasta el hallazgo de los dispositivos, le impedía rehacer su vida y le generaba un profundo malestar emocional.
A pesar de que no se registraron agresiones físicas, la mujer denunció haber sufrido malos tratos psicológicos continuados y una vulneración constante de su privacidad, sintiéndose vigilada en cada desplazamiento.
Consecuencias legales
El análisis técnico permitió identificar al detenido como el titular de los dispositivos, los cuales había fijado con silicona en la parte inferior de los automóviles que su exmujer utilizaba habitualmente.
El hombre ha sido puesto a disposición judicial como presunto autor de un delito de acoso en el ámbito de la violencia de género. Por su parte, la UFAM ha activado medidas preventivas de seguridad para proteger a la víctima ante el riesgo detectado durante la investigación.
















