Con la tradicional carrera de la San Silvestre Vallecana a la vuelta de la esquina, muchos corredores, tanto habituales como principiantes, ven en la prueba una forma de despedir el año con deporte y salud. Sin embargo, expertos advierten sobre la importancia de controlar la frecuencia cardíaca para evitar riesgos y disfrutar la experiencia.
El Dr. Rodrigo Ortega Pérez, cardiólogo del Hospital Universitario Ruber Juan Bravo y del Centro médico‑quirúrgico Olympia Quirónsalud en Madrid, explica que la clave está en prepararse con antelación y no dejarse llevar por la emoción de la competición: “La falta de entrenamiento es una de las causas más comunes de abandonar o sufrir problemas durante estas pruebas. Correr no es competir contra otros, sino contra uno mismo”.
¿Por qué es importante vigilar las pulsaciones?
La frecuencia cardíaca —medida en pulsaciones por minuto (PPM)— sube con el ejercicio porque el corazón debe bombear más rápido para llevar oxígeno a los músculos. Según Ortega, no existe un número único que sirva para todos, ya que las pulsaciones dependen de la edad, la forma física, el nivel de entrenamiento y otros factores como la temperatura o el sueño.
Además, al correr distancias como los 10 km de la San Silvestre, la intensidad del ejercicio varía: los atletas pueden mantenerse cerca del 90 % de su frecuencia máxima durante muchos minutos, mientras que los corredores populares suelen permanecer por debajo de esos umbrales.
Consejos prácticos para el gran día
Ortega subraya que el uso de tecnología como pulsómetros y relojes inteligentes puede ser muy útil para monitorizar el esfuerzo durante el entrenamiento y la carrera.
Si las pulsaciones aumentan más de lo esperado, el experto recomienda respirar de forma controlada, reducir el ritmo y escuchar las señales del cuerpo en lugar de obsesionarse con los números. Asimismo, una planificación progresiva del entrenamiento, descanso adecuado y alimentación equilibrada sirven para llegar en las mejores condiciones posibles al 31 de diciembre.
Ortega también recuerda que es mejor dejar la competición para otra ocasión si se arrastra una lesión preexistente, ya que muchas recaídas se deben a esfuerzos antes de estar completamente recuperado.
Con estos consejos, la San Silvestre puede ser una forma segura y saludable de finalizar el año para quienes se preparen adecuadamente y presten atención a su ritmo cardíaco durante toda la prueba.














